Anoche, recordaba con un buen amigo a aquellas que nos han conquistado el corazón entrando por el estómago. Es común que toda receta sea aderezada y modificada con esos pequeños trucos que dan las abuelas, mamás y demás participantes del arte culinario.
Y recordamos una anécdota de la cual fuimos testigos:
Y recordamos una anécdota de la cual fuimos testigos:
...y la abuela les responde :
Un día, preparando la cena de navidad -para variar era pollo, chale...- la abuela de la casa supervisaba la cocina, en eso, una de las nietas preguntó:
- abuela, asi están bien atadas las patas del pollo ?
- puesss si, están bien así...
En eso, se acerca una de las hijas de la abuela y le pregunta a esta:
- oye mamá, por cierto, porqué tenemos que amarrarle las patas al pollo para cocinarlo ??
- no sé ustedes pendejas, pero yo se las amarraba para que cupiera, porque mi horno era pequeño.
Y es aquí donde me pregunto : cuántas pendejadas no hacemos al momento de cocinar y que no tienen nada que ver en lo absoluto con la sazón o la receta ??
Por cierto, si quieren que el huevo salga mas esponjado, solo agreguen un chorrito de leche...no es albur. Pueden reemplazar con queso fresco.
Buen provecho !!
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Por cierto, si quieren que el huevo salga mas esponjado, solo agreguen un chorrito de leche...no es albur. Pueden reemplazar con queso fresco.
Buen provecho !!
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